«Esté donde está; de lo contrario, extrañará su vida»  Buda.

Mantener un alto nivel de atención y concentración es un proceso complejo; desde la activación previa necesaria, pasando por focalizar la atención en uno o varios estímulos o prolongarla en el tiempo.

Si viajamos en coche, deberemos estar atentos a diferentes estímulos (resto de vehículos, señales de tráfico, panel de control de nuestro coche…), durante un tiempo que puede prolongarse en tramos de dos horas, según nos recomiendan, además, las estadísticas de la DGT nos dicen que el porcentaje de accidentes por distracción (teléfonos móviles, sobre todo) es altísimo.

El nivel de atención de un cirujano a diversos estímulos y durante varias horas, también es de vital importancia, o el de un piloto de avión, del que depende las vidas de cientos de personas.

En el caso del portero, no lo es menos. Los estímulos son muchos, de todo tipo (el balón, los gritos de los compañeros y adversarios, la lectura de la jugada, el árbitro, el público…) el período en el que debe prolongarse esta atención, tendría que mantenerse durante todo el partido o el entrenamiento y un déficit en el nivel de atención puede ocasionar ineficiencias en nuestra labor en la portería.

Existen diferentes test para evaluar la atención focalizada, tanto para medir la celeridad, como la desatención y por supuesto esta habilidad se puede entrenar para mejorarla.

La plasticidad cerebral es la base de la recuperación de la atención focalizada. El cerebro y sus conexiones neuronales se fortalecen con el uso de las funciones que dependen de estos. Si entrenamos la atención focalizada, las conexiones cerebrales se fortalecerán. Así, cuando necesitemos centrar nuestra atención, las conexiones serán más rápidas y eficientes, mejorando nuestra atención focalizada.

Para entrenar y mejorar esta competencia, te proponemos lo siguiente: 1. Define los objetivos de lo que vas a hacer, antes de llevarlo a cabo. 2. Elije el momento idóneo y evita distracciones. 3. Ordena tus descansos, recuerda que el descanso forma parte del entrenamiento. 4. Repite varias veces los detalles que consideres más importantes. 5. Aficiónate a la lectura. 6. Relájate. practica la respiración abdominal. 7. Haz sudoku, incluso sopas de letras en tu tiempo libre con cierta frecuencia. 8. Para quienes ya estáis relacionados con estas técnicas, os propongo que hagáis Mindfulness, observación y meditación básica.

Todas estas técnicas pueden parecer innecesarias para contribuir a mejorar el rendimiento en la portería: sin embargo, nada más lejos de la realidad. Su aplicación es más que beneficiosa para dejar nuestra mente «limpia y despejada»; romper con la rutina, dejarla descansar, en definitiva, prepararla mejor para competir con mayores garantías de éxito.

Estas recomendaciones son válidas para tu juego como portero, para tus estudios, para tu trabajo y para facilitar la toma de decisiones con éxito en cualquier orden de la vida.